Las haciendas vascas recuperaron en mayo todo el terreno perdido en los cuatro meses anteriores en lo relativo a la recaudación fiscal, al revertirse la tendencia inicial de 2013.
La razón de la mejora de la recaudación es el Impuesto de Sociedades, que ha subido un 21%. Concretamente Bizkaia, territorio histórico en el que tributan las grandes empresas vascas, es el único que registra una evolución positiva con un crecimiento del 1,1%, mientras que Araba y Gipuzkoa bajan en torno a un 2%. Todo ello en un esquema fiscal que conlleva que Bizkaia transfiere a las otras dos diputaciones parte del IVA que recauda, 225 millones hasta ahora.
Dado que los meses de mayo, junio y julio son los que marcan la tendencia del ejercicio. Habrá que esperar hasta agosto, cuando ya estén cerradas las campañas del IRPF y del Impuesto de Sociedades, para realizar un balance más ajustado.
El Impuesto sobre la Renta supone en torno al 38% de los ingresos de las administraciones vascas y es el principal termómetro fiscal junto al IVA, que representa el 35% de la recaudación.
Los altos niveles de paro y las rebajas salariales están suponiendo un lastre para las retenciones del IRPF, que acumulan un retroceso del 2,4% en los cinco primeros meses del año, si bien la situación ha mejorado notablemente respecto al 3,4% de abril una vez empezado el periodo de presentación de declaraciones.
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