El caso “Mercedes” demuestra que el Concierto Económico es un sistema de riesgo

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La separación en distintas empresas de las diversas actividades que realiza la multinacional Mercedes en el Estado español genera una distorsión en el pago de impuestos como consecuencia de lo previsto en el Concierto Económico. Hasta ahora, la Diputación Foral de Araba no sufría el impacto real del IVA a devolver que genera la fabrica de Mercedes-Benz en Vitoria-Gasteiz porque era compensado con el impuesto a ingresar por la venta de vehículos en todo el Estado. La factoría de Vitoria-Gasteiz exporta el 90% de su producción y las ventas al exterior se realizan sin IVA, mientras que la empresa debe abonarlos a sus proveedores, lo que genera una liquidación negativa para la Hacienda Foral de Araba.

Al separar las actividades por sociedad, la Diputación deberá asumir el impacto real de la fábrica, sin poder compensar cantidad alguna con la venta de coches, ya que esta actividad colgará de otra sociedad mercantil y su sede seguirá en Madrid.

La perdida de ingresos para Araba, y por consiguiente para el Gobierno Vasco, será de 20 millones de euros en 2017, cuando se hará la primera fase de la segregación societaria. Una vez completada la segregación, la pérdida anual ascenderá a los 200 millones de euros.

El caso “Mercedes” demuestra que el Concierto Económico conlleva un riego unilateral e invalida muchas de las criticas que recibe. Araba y Euskadi asumen las consecuencias derivadas de una decisión adoptada en la sede de Daimler Benz, Stuttgart, que no implica ningún cambio en la producción de la planta de Vitoria-Gasteiz. Esta decisión es una modificación organizativa y burocrática.

 Pedro Luis Uriarte y Juan Antonio Zarate, exdiputado de Hacienda del PP y expresidente de las Juntas Generales de Araba, indicaban que la vía para resolver el “problema Mercedes” es la negociación de la nueva Ley de Cupo para buscar un ajuste.

Zarate indica que el camino es modificar los índices en las compensaciones del IVA, por lo que se ajustaría la realidad de la recaudación de este impuesto vinculado al consumo final a las cifras reales de los que sucede en el País Vasco. Javier de Andrés, exdiputado Foral de Araba, plantea intentar atraer la sede de la comercializadora de vehículos a Vitoria-Gasteiz.

Fuentes:

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